Fotos del libro El Ciclo del Amor

purim-en-shenkin-1988

A comienzos de los 80 –ya no puedo ser más específico– estudié fotografía en la escuela Camera Obscura, pequeña y tradicional, en un piso de la calle Allenby en Tel Aviv, a un par de cuadras de mi oficina de producciones editoriales. De regreso de un viaje, mi suegro Marcos Bernstein trajo una cámara Canon A-1, de extraordinaria calidad y avanzada para la época. Tanto, que más de 25 años después, habiendo perdido la original a una relación desgraciada, compré vía Ebay dos: una para la clase de fotografía en la secundaria de mi hijo Mark, y otra para mí, para guardar. Más que nada, lo hice por lo que llaman el valor sentimental; el peso de los recuerdos, el afán de transmitir a mis chicos lo mejor que tuve. Pero practicamente no la uso. Ya no saco fotos, lástima.

El libro es de 2008 y se puede todavía hallar en las bodegas de Amazon, aquí.

Casi todas estas fotografías las tomé en esa época. Son de mi gente, de las que eran mis relaciones, mi entorno en la mayoría de los casos; mi ciudad. Era consciente de mis innumerables limitaciones técnicas y ávido de retratar, más allá de los sueños, las imágenes de mis ilusiones en blanco y negro.

Ese es el valor que tienen, obviamente no el artístico ni el profesional: una extensión de la palabra, una captura de lo que mi retina percibía y una confirmación de la validez de algunos de los poemas que las fotos ilustran.

[nggallery id=1]