El presupuesto y Abel Maldonado

Después de más de 100 días de atraso, impasse, parálisis y desastre económico. El senado estatal de California aprobó el presupuesto, diseñado para recuperar 42,000 millones de dólares.

Abel Maldonado, a quien conozco y respeto desde hace 10 años, volvió a hallar un papel protagónico. Hace nueve fue el primero en pronunciar un discurso en español durante la convención nacional republicana que eligió como candidato presidencial a George W. Bush, a quien Maldonado llamó repetidamente “mi compadre”. Posteriormente cruzó varias veces el Rubicón político, votando, al menos en una oportunidad adicional, junto con los demócratas. Había que ver esta mañana, cuando él explicó su voto. Detalló su historia de una familia de inmigrantes mexicanos, agradecida con el país y el estado (son acomodados hacendados en Santa María, California); mientras tanto, sus colegas republicanos lo miraban con enojo no contenido.

Es que el voto de Maldonado denota y refleja la división que se ahonda en el partido Republicano desde su derrota electoral. El partido llamado GOP (Good Old Party) no puede retener a los hispanos, porque en su mayoría apoya la deportación de millones de ellos, indocumentados. No puede retener a los moderados, y quedan en él los más recalcitrantes conservadores, que son como varas de acero en las ruedas de la economía y la política.

Maldonado quiere volver a postularse como Contralor del estado en 2010. Para ganar, necesitará del voto demócrata y el voto latino. Lo que hizo hoy, no puede perjudicarle.